PETO DE REGUENGO
REGUENGO
RAMIRÁS
OURENSE
Se llama petos de ánimas a una de las manifestaciones materiales del culto a los muertos y son, generalmente, sencillos monumentos de piedad popular asociados a la idea del purgatorio.
En Galicia es frecuente encontrarlos en caminos, encrucijadas, atrios de iglesias, etc.
Los historiadores y etnógrafos sitúan su aparición a partir de la Contrarreforma, datándose los más antiguos en el siglo XVII, aunque no sería hasta el siglo XVIII cuando se construyan con más profusión.
Su finalidad es la de ofrecer limosnas de todo tipo a las ánimas del Purgatorio, siendo su castigo temporal y pudiendo así alcanzar el Cielo.
En compensación, una vez liberadas intercederán por quienes realizaron las ofrendas.
Las limosnas no eran de carácter estrictamente monetario, también podía tratarse de productos agrícolas.
Los petos de ánimas suelen estar construidos en piedra con una cruz en lo alto, por lo general con imágenes de las ánimas en el fuego del purgatorio y una figura que las vela (santo, rey u obispo).
En la parte frontal aparece un peto o hucha para depositar la limosna y protegido con una reja o un cristal.
Algunos llevan leyendas del tipo:
Un alma tienes y no más, si la pierdes qué harás...
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XOAN ARCO DA VELLA
PETO DE ESMORIZ
ESMORIZ
SAN PEDRO DA TORRE
PADRENDA
Se llama petos de ánimas a una de las manifestaciones materiales del culto a los muertos y son, generalmente, sencillos monumentos de piedad popular asociados a la idea del purgatorio.
En Galicia es frecuente encontrarlos en caminos, encrucijadas, atrios de iglesias, etc.
Los historiadores y etnógrafos sitúan su aparición a partir de la Contrarreforma, datándose los más antiguos en el siglo XVII, aunque no sería hasta el siglo XVIII cuando se construyan con más profusión.
Su finalidad es la de ofrecer limosnas de todo tipo a las ánimas del Purgatorio, siendo su castigo temporal y pudiendo así alcanzar el Cielo.
En compensación, una vez liberadas intercederán por quienes realizaron las ofrendas.
Las limosnas no eran de carácter estrictamente monetario, también podía tratarse de productos agrícolas.
Los petos de ánimas suelen estar construidos en piedra con una cruz en lo alto, por lo general con imágenes de las ánimas en el fuego del purgatorio y una figura que las vela (santo, rey u obispo).
En la parte frontal aparece un peto o hucha para depositar la limosna y protegido con una reja o un cristal.
Algunos llevan leyendas del tipo:
Un alma tienes y no más, si la pierdes qué harás...
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XOAN ARCO DA VELLA
LENDA DA PONTE DA SENRA
RÍO TEMES
RIBARTEME
AS NEVES
Lenda da Ponte da Senra
A lenda conta que toda muller cun embarazo complicado, debía achegarse á ponte e deitarse debaixo dela, á espera de que chegaran un home e unha muller, que posteriormente serían os padriños do neno.
Estas persoas terían que acudir a xunto da rapaza e botarlle auga sobre o abdome.
Durante este proceso, ningún animal podería cruzar a ponte para que o feitizo fora efectivo polo que, co motivo de tentar evitalo, a cada lado da ponte se situaría algún familiar da futura nai.
En caso contrario muller abortaría.
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PETO DE GONDARÉM
GONDARÉM
CAMINHA
Se llama petos de ánimas a una de las manifestaciones materiales del culto a los muertos y son, generalmente, sencillos monumentos de piedad popular asociados a la idea del purgatorio.
En Galicia es frecuente encontrarlos en caminos, encrucijadas, atrios de iglesias, etc.
Los historiadores y etnógrafos sitúan su aparición a partir de la Contrarreforma, datándose los más antiguos en el siglo XVII, aunque no sería hasta el siglo XVIII cuando se construyan con más profusión.
Su finalidad es la de ofrecer limosnas de todo tipo a las ánimas del Purgatorio, siendo su castigo temporal y pudiendo así alcanzar el Cielo.
En compensación, una vez liberadas intercederán por quienes realizaron las ofrendas.
Las limosnas no eran de carácter estrictamente monetario, también podía tratarse de productos agrícolas.
Los petos de ánimas suelen estar construidos en piedra con una cruz en lo alto, por lo general con imágenes de las ánimas en el fuego del purgatorio y una figura que las vela (santo, rey u obispo).
En la parte frontal aparece un peto o hucha para depositar la limosna y protegido con una reja o un cristal.
Algunos llevan leyendas del tipo:
Un alma tienes y no más, si la pierdes qué harás...
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PETO DE LOIVO
LOIVO
VILA NOVA DE CERVEIRA
Se llama petos de ánimas a una de las manifestaciones materiales del culto a los muertos y son, generalmente, sencillos monumentos de piedad popular asociados a la idea del purgatorio.
En Galicia es frecuente encontrarlos en caminos, encrucijadas, atrios de iglesias, etc.
Los historiadores y etnógrafos sitúan su aparición a partir de la Contrarreforma, datándose los más antiguos en el siglo XVII, aunque no sería hasta el siglo XVIII cuando se construyan con más profusión.
Su finalidad es la de ofrecer limosnas de todo tipo a las ánimas del Purgatorio, siendo su castigo temporal y pudiendo así alcanzar el Cielo.
En compensación, una vez liberadas intercederán por quienes realizaron las ofrendas.
Las limosnas no eran de carácter estrictamente monetario, también podía tratarse de productos agrícolas.
Los petos de ánimas suelen estar construidos en piedra con una cruz en lo alto, por lo general con imágenes de las ánimas en el fuego del purgatorio y una figura que las vela (santo, rey u obispo).
En la parte frontal aparece un peto o hucha para depositar la limosna y protegido con una reja o un cristal.
Algunos llevan leyendas del tipo:
Un alma tienes y no más, si la pierdes qué harás...
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PETO DA RÚA CORUÑA
RÚA CORUÑA
TUI
Se llama petos de ánimas a una de las manifestaciones materiales del culto a los muertos y son, generalmente, sencillos monumentos de piedad popular asociados a la idea del purgatorio.
En Galicia es frecuente encontrarlos en caminos, encrucijadas, atrios de iglesias, etc.
Los historiadores y etnógrafos sitúan su aparición a partir de la Contrarreforma, datándose los más antiguos en el siglo XVII, aunque no sería hasta el siglo XVIII cuando se construyan con más profusión.
Su finalidad es la de ofrecer limosnas de todo tipo a las ánimas del Purgatorio, siendo su castigo temporal y pudiendo así alcanzar el Cielo.
En compensación, una vez liberadas intercederán por quienes realizaron las ofrendas.
Las limosnas no eran de carácter estrictamente monetario, también podía tratarse de productos agrícolas.
Los petos de ánimas suelen estar construidos en piedra con una cruz en lo alto, por lo general con imágenes de las ánimas en el fuego del purgatorio y una figura que las vela (santo, rey u obispo).
En la parte frontal aparece un peto o hucha para depositar la limosna y protegido con una reja o un cristal.
Algunos llevan leyendas del tipo:
Un alma tienes y no más, si la pierdes qué harás...
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XOAN ARCO DA VELLA
